martes, 1 de septiembre de 2009

Suceso en el sitio conocido por Cahíz

Han encontrado un tesoro semioculto en la base de una encina milenaria. El oficial de tundidor Juan Alamillo y el jornalero a su cargo Atanasio Benítez, han encontrado en la mañana de ayer un enorme tesoro que se cree de época romana. Normalmente estos hallazgos no se conocen más allá de las paredes de las casas de los familiares, pero en este caso y debido al exceso de aguardiente, todo el pueblo se enteró en un santiamén. Parece, tal y como han comentado el maestro de primeras letras Don Manuel Borrego y el presbítero Don Cristóbal Padilla posiblemente sea el tesoro de un patricio Hispano-Romano. Si eso fuera cierto, y no es que dudemos de la sapienza de nuestros historiadores locales, podríamos por fin afirmar que nuestra Villa es tan antigua como la antigua Arrunda.
Por otra parte, los descubridores del tesoro, parece que han tenido algunos problemas. O mejor dicho una serie de disputas que han dejado muy malherido al oficial de tundidor. Parece ser que después de trajinar un par de botellas de aguardiente con la alegría, acabaron al fin en la relación que tienen desde antaño. Como sabemos sus familias se pelearon hace unos veinte años por unos olivos que se echaron a perder, culpándose los unos a los otros, como fuere, salieron a relucir los olivos, y poco después las navajas. En el primer intento tuvieron suerte de que allí estuviera José María El Tempranillo, que puso paz en el asunto y les recordó que el tesoro que han hallado valían 1000 veces los olivos del asunto, en esa ocasión volvieron a sentarse a beber aguardiente y a celebrar juntos. Pero cuando los bandoleros ya se habían ido a sus menesteres, volvió la disputa, sobre todo cuando llegó Francisco Alamillo, hermano del anterior, pero de más difícil contentar. Aseguró delante de todos que el tesoro pertenecía a su familia, pues se había encontrado en terrenos que eran de un tío suyo. Como fuera a Atanasio Benítez no le gustó lo que oía, y volvieron a relucir las navajas, dos contra uno, pero Atanasio es un hombre bragado en estos menesteres, y golpeó al hermano y clavó la navaja en el vientre de Juan. Ahora este se debate entre la vida y la muerte y el Jornalero Atanasio es buscado por los Migueletes, aunque se cree que se habrá unido a alguna de las partidas de bandoleros de José María.